para Magda y Sebs
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hoy el día era feliz, y aún lo es. anoche leí versos de arseny
tarkovsky y hablé de viajes. un disco de gorillaz esperaba a ser
escuchado, se iban resolviendo las cosas, hubo chilaquiles en la mañana y café.
vi a mis hermanas. ahora hay agua y mezcal y por fin suena gorillaz, audífonos
puestos, volumen alto. hoy roberto bolaño hubiera cumplido 64
años. a medio día vi que mi querido amigo ernesto reséndiz oikión escribió que
había fallecido jorge lópez páez. y la tristeza apareció, se sentó en la sala. ernesto
escribió una nota hermosa y termina diciendo:
"Uno agradece
vidas tan luminosas y generosas. Gracias, don Jorge."
y sí. la noticia
se fue confirmando por todos lados.
nació en huatusco,
veracruz, en 1922. vivió 94 años, me atrevería a decir que las vivió pleno y
feliz, amó y fue amado. escribió. vivió de escribir novelas y cuentos. fue un
enorme de nuestras letras: nuestras. las mexicanas y las letras lgbt. escribió el cuento “doña
herlinda y su hijo” (1980), “silenciosa sirena” (1988), “los cerros azules” (1993), “¡a huevo, kuala lumpur!”
(2012, [que tiene uno de los momentos homoeróticos más increíbles de la
literatura nacional y que lo tengo dedicado de su puño y letra]).
a jorge le debo muchas cosas en mi vida, mucho aprendizaje. fue
mi primera referencia de una persona homosexual, que salía a cenar acompañado
con su pareja y veía a sus amigos que lo querían, lo admiraban y reían con él.
era increíblemente inteligente, de una plática luminosa de verdad, una
increíble biblioteca de información literaria, cultural y de méxico. y le
gustaba comer y lo disfrutaba enormemente. se reía con todo él. una de las
risas más plenas que he escuchado en mi vida. era travieso, se le iluminaba el
rostro si encontraba una víctima para molestar. toda mi infancia, adolescencia
y adultez temprana aprendí de él y lo admiré mucho. en su casa descubrí la
pintura de juan soriano y escuché a alí chumacero llenar la noche de
versos e inteligencia. jorge escuchaba siempre. siempre
tuvo palabras de aliento y me preguntaba “mauricio,
¿ahora qué estás leyendo?”. siempre le hablé de poetas y me preguntaba, me
recomendaba autores jóvenes. fue una guía para entender y leer mejor a los
contemporáneos. nunca supe si le gustaba ginsberg o no, pero era
recurrente en nuestra conversación.
nunca le mostré mis textos.
siempre le agradeceré sus palabras, su presencia y haberme
enseñado, existiendo, que se podía ser gay y estar con los amigos, comiendo,
bebiendo, riendo, hablando.
pero hay algo que nunca podré olvidar, la última
vez que lo vi, en un día muy triste, me preguntó como siempre que andaba
leyendo y le hablé de mi interés por ir leyendo los clásicos. me dijo: “tienes que leer “lolita” de nabokov. no
lo dudes. cómprala ya. vas a ver, te va a encantar”. nunca le agradecí en
persona, nunca podré dejar de agradecerle eso. leer (y empezar a leer) “lolita”
fue uno de mis momentos más importantes en mi relación con los libros y la
escritura, uno de esos momentos antes-después.
creo que jorge vivió muy pleno. sus 94 años
fueron toda una vida. ¿qué habrá pensado el jovencito veracruzano de huatusco
de esta ciudad de méxico tan maravillosamente diferente ahora? ¿de tanta
libertad? ¿de tanta alegría en la diferencia? ¿de tanta disidencia y libertad
en lo sexual? gracias jorge, por todo, por haberte
conocido.
1 comentario:
:( el corazón hace la mejor despedida de las personas a las que amamos!
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