miércoles, 30 de noviembre de 2016

el tiempo y su materia (7)

[¿qué quedará de estos días? ¿qué quedará de la memoria? ¿cómo nos construimos desde el desasosiego y el silencio?



devoro las últimas páginas de “los recuerdos del porvenir” (1963) de elena garro que me fascinó & entristeció simultáneamente, lo termino antes de medianoche (“mau: hay que leer a la garro”, me hago una nota mental y volveremos sobre sus letras pronto), me duró pocos días. sigo sin escribir sobre leonard cohen y su ausencia. pienso en simon & garfunkel y su “i am a rock” (1965) cuando leo esta frase de la garro:

su voz se había deshabitado.

diciembre empieza en unos minutos y pareciera absurdo (volver a) escuchar “i am a rock” (una vez más) porque todavía no es invierno, ni hay un diciembre obscuro y profundo, pero la novela habla de las piedras y de lo que queda y la memoria y, siempre:

i am a rock
i am an island

sábado, 26 de noviembre de 2016

el tiempo y su materia (6)



[este tiempo ¿es tangible? ¿qué quedará de estos días? ¿cómo vamos a contar esta historia? ¿habrá alguien que escuche cuando en unos años hablemos de lo que sucedió en el 2016? ¿dónde guardamos la memoria?] en estos días de frío no puedo concentrarme y la novela de lezama lima simplemente no la puedo acabar de leer, pero tomé “los recuerdos del porvenir” de elena garro y sentí una bocanada de aire fresco (y habla de la memoria, desde la memoria, veamos a dónde nos lleva). los pies helados. una canción de perfume genius viene y vuelve, “dark parts”:

the hands of god were bigger than grandpa’s eyes
but sill he broke the elastic on your waist
but he’ll never break you, baby
but he’ll never break you baby

bebo café y té negro con miel en las noches. camino cansado. me hace feliz encontrar libros de poesía y volver a los mismos versos que me han hecho temblar. murió leonard cohen y no he escrito sobre ello pero escucho “chelsea hotel nº2” y me lleno de luz. el mundo que conocíamos construido con tanto siglo xx se viene abajo. los amigos se mudan a yucatán. en la madrugada se supo que había muerto fidel castro y terminaba un capítulo de la historia, de la gran historia, la isla caribeña que hizo algo que nadie había hecho: decir no. la alegría es un pan recién horneado y el calor en las cobijas. miro las nubes. atardece y amanece todos los días, es lo único que tenemos seguro. hay hojas secas en las calles en la ciudad de méxico. vuelvo a escuchar la misma canción:

i will take the dark part
of your heart into my heart