lunes, 28 de octubre de 2013

los suburbios, hace tres años

en agosto del 2010 caía en mis manos el disco “the suburbs” de los canadienses de the arcade fire. ese disco me ha estado acompañando desde entonces. lo escucho una y otra vez y me sigue sorprendiendo. me conmueve, me emociona, me eriza la piel. lo escucho desde hace tres años una y otra vez.


mañana saldrá a la venta “reflektor”, el cuarto álbum del grupo. por supuesto estoy ansioso: ¿qué sucederá? ¿logrará the arcade fire superar la maldición del tercer álbum? ¿logrará superar lo logrado con “the suburbs”?

la historia del grupo es un poco así: sacó un primer disco, “funeral”, en 2004 donde se incluyen las maravillas de “neighborhood #1 (tunnels)”, “neighborhood #4 (7 kettles)” y “wake up”. en 2007 aparece “neon bible” con “intervention”, “black wave/bad vibrations” (¡uuuuuuh!), “the well and the lighthouse”, “(antichrist television blues)”, “windowsill” y “no cars go”, y el tercer álbum llegó en 2010 y fue/es “the suburbs” y fue maravilloso.


este último contiene 16 canciones de las cuales “ready to start”, “modern man”, “half light i”, “suburban war” (que desde agosto del 2010 tiene un lugar preferencial en mi corazón como la mejor canción y la más preferida siempre jamás), “we used to wait” y “sprawl ii (mountains beyond mountains)” son mis favoritas.

la línea musical y narrativa de “the suburbs” cuenta una historia con la que me identifico: de pronto uno avanza en la vida y mira hacia atrás. atrás está uno mismo (adolescente o adulto temprano) en la que de verdad el mundo daba mucho miedo y nada podía detenerme, que había sombras acechando, que si uno se detenía y no salía corriendo las sombras ganarían todas las batallas y un puede ver que el tiempo pasa y que atrás quedó el tiempo en que, aunque se tenía miedo, se estaba bien y que realmente no pasaba nada, no se jugaba uno la vida, pero era entonces, en esa ansia de vida, que se cometerían los actos que trazarían el camino de la vida. estoy aquí, ahora, aquí y ahora, por todo lo que fui entonces, por lo que hice, por lo que dije, por mis torpes batallas y sus derrotas, porque en esos años aprendí a nombrar las cosas que para mí eran importantes.


espero ansioso el nuevo disco. no me hago ideas, ni sé que esperar. escuché (obligado) “reflektor”, la primera canción. no sé nada más. escribo esto escuchando “the suburbs” una vez más el día de hoy. veamos qué sucede en/con este nuevo disco. estaré ansioso como niño antes de que lleguen los reyes magos.


(el mejor concierto de mi vida: the arcade fire en guadalajara. era sábado, era 16 de octubre y era 2010. estaban ahí laura y christian. espectacular)



viernes, 11 de octubre de 2013

ese viaje



(comienzo)

(la niebla tiembla
lentamente, se abre
el aire en la tinta.
comienza la tarde, los

espejos anuncian palabras
que no volverán, la
calma envuelta de
viento. comienza la

ciudad)

Mauricio Álvarez

***
era once de octubre. era 2008. los mercados internacionales colapsaban hace cinco años. lo peor de la crisis estaba sucediendo en ese momento. y nosotros, christian, lalito, chief, edurne, yuyis y mau llegábamos a japón.


comenzaba ese viaje. el que me cambiaría la vida. el viaje de mi vida. el mejor viaje, el más fantástico, el gran sueño de llegar a japón y cruzar el océano pacífico y oler japón, beber japón, comer japón, mirar japón: los árboles en otoño en japón. el gran viaje. la felicidad.

fueron tres semanas de risas, de aprendizaje, de enfrentamiento, de algunas cosas increíblemente tristes, de cambiar la forma de pensar, de saber que hay otro mundo y otra forma. que increíble fue.

repaso las fotografías, las páginas escritas allá, los recuerdos, lo que sucedería en mi interior estando allá, mis sombras, mis silencios, mis amigos, mi pareja, mis lecturas japonesas meses después. todo tan vivo, todo comenzó hace cinco años cuando el avión aterrizó en narita. y de ahí: tokio, yokohama, nikko, hakone, osaka, kioto, himeji, hiroshima, miyajima, nagano, fukuoka, obuse. uff.

volveré. si.