viernes, 29 de septiembre de 2017

20 años de “portishead” de portishead

otro de los discos que escuchábamos entonces y que seguimos escuchando cumple 20 años. "portishead" de portishead. otro de los discos fetiche. nuestros discos se van volviendo adultos. nosotros, viejos.

nos toca construir la memoria y en este 29 de septiembre frío y lluvioso y triste volvemos a escuchar: "cowboys" inicia el disco: un hechizo que dura 50 minutos en once canciones.


disco para escucharse de principio a fin. los días lluviosos y nublados suena muy bien. en los días con sol y cielo azul también, especialmente las canciones "undenied" y "all mine". al escuchar "undenied" por primera vez, hace veinte años, el embrujo fue total: la voz de beth gibbons desde entonces es compañía. el hilo se desenrolla (o se enrolla, según) y el disco avanza, el dolor bonito de escuchar "humming" y "mourning air", un trip hop para quedarse inmóvil y mirar el aire, como sin estar. el hilo sigue (o se retrae, según). ya hacía el final, "elysium" siempre me ha parecido una perfecta canción de venganza, para mover la cabeza len-ta-men-te de izquierda a derecha, canción para subir el volumen, esas alegrías.

al llegar al final, "western eyes", las últimas notas, ahí sucedió un momento: había un antes de "portishead", había un después. en ese después seguimos.

¿cómo construimos la historia que vivimos? ¿esa historia personalísima de la que muy pocas personas formamos parte, que no aparecerá en los libros? "portishead" apareció cuando todos los barcos habían naufragado, el incendio había pasado, no había nada más que hacer (y, en realidad, nada había sucedido y la vida esperaba todavía, pero entonces no se sentía así). "portishead" fue la bocanada de aire fresco que me regresó a la superficie. volver a respirar. mirar lentamente las ruinas. sentir que las palabras volvían a los labios y a las manos. es un disco mágico y triste. otro de los discos que me construyeron.

era 1997, el-año-en-que-todo-ocurrió. veinte años más tarde todavía lo escucho y todavía hay escalofríos donde es importante que los haya (escucharlo con audífonos, una maravilla)

“portishead” de portishead fue escrito por geoff barrow, adrian utley y beth gibbons, producido por ellos y dave mcdonald. apareció el 29 de septiembre de 1997. en mis manos debe haber llegado en noviembre o diciembre.

(gracias)

tadaima, otra vez

(“tadaima” es una palabra japonesa que quiere decir “ahora estoy en casa”, tiene el kanji ima, que significa “ahora”)


toda ciudad es un organismo vivo: se mueve, se crea, cambia. no lo vemos pero sucede que conforme avanzan los días cambian las cosas, como un cuerpo. le crecen los árboles, se caen las hojas, un negocio al que nunca íbamos cierra y no lo vemos, aparece una nueva construcción, hay un café nuevo, aparecen edificios y vialidades. un día, la calle de siempre funciona en sentido contrario y ahora hay bicicletas. todo es un caos constante y cambia. y a veces, como en los cuerpos, las cosas cambian sin avisar: se rompe, se cae, se quema, se ahoga. y la amamos así, nos aferramos, la cuidamos, la queremos, es nuestra ciudad y la amamos cada vez más aunque tengamos miedo. es nuestra casa.


había un muro en la colonia roma norte que tenía escritos unos versos que me sacaron el aliento la primera vez que lo vi. las últimas veces que pasé ya no estaban los versos. el muro estaba vacío, sin las palabras correctas, sin el hechizo, sin conjuro. debería de seguir ahí porque las palabras no se disipan aún. y ahora, en estos días de final de septiembre, no sé si el muro está ahí todavía.