miércoles, 22 de mayo de 2013

buen día, querida computadora


“In the next world war
In a jackknifed juggernaut
I am born again”

así empieza el disco “ok computer” de radiohead, la primera canción, “airbag”. el disco que apareció en mayo de 1997 y que se estuvo gestando en las mentes y manos y voces de thom yorke, jonny greenwood, colin greenwood, phil selway, ed o’brien y nigel godrich desde 1996. 12 canciones. el disco perfecto.



era mayo, era 1997. era el año en que todo ocurrió. eran los días de la tristeza enorme y la derrota. el invierno europeo quedaba detrás y de un día al otro el paisaje pasó a ser trópico, calor y mosquitos. la soledad era enorme.

mirando la televisión en una mañana de lluvia, asustado, apareció “paranoid android” y los escalofríos llenaron mi piel. ese mismo día fui a buscar el disco. radiohead no me era ajeno, “the bends”, el disco de 1995, ya estaba entre mis discos favoritos así que era una especie de garantía.


al poner el disco, “airbag” me sacudió por completo, esa música, esa voz, esas palabras. uffff:

“In an interstellar burst
I am back to save the universe”

“paranoid android” me volvió a erizar la piel y desde hace 16 años se volvió una de mis canciones favoritas. ojos llorosos. volvía a llover, triste verano en el trópico. calor. sudor. ejércitos interminables de mosquitos. luego “subterranean homesick alien” y su melancolía, “exit music (for a film)”, de golpe los recuerdos, una tarde en la ciudad de méxico viendo una película de baz luhrman.

“let down”. la quinta canción:

“Floor  collapsing
Floating, bouncing back
And one day…
I am going to grow wings
A chemical reaction
Hysterical and useless”

wow. lágrimas. cosa extraña porque hacía tiempo, pese a la tristeza, no me daban ganas de llorar. y luego, “karma police” y su poderosísima frase:

“Phew, for a minute there, i lost myself, I lost myself”
  


la secuencia “fitter happier”, luego “electioneering” y luego “climbing up the walls” me sorprende todavía 16 años después de la primera vez que lo escuché. me incomoda, me angustia. dolor delicioso.


las últimas 3 canciones: “no surprises”, “lucky” y “the tourist”. melancolía, derrota, prenderle fuego a los barcos.

“Sometimes I get overcharged
That’s when you see sparks
You ask me where the hell I’m going
At a thousand feet per second”

otro disco perfecto para la derrota personal y para reencontrarme. abrir los ojos. salir a caminar bajo la lluvia.  este disco, también, me salvó la vida. la vida es rara y el disco que compré en 1997 me lo robaron, gente mala, pero volví a comprarlo. no entiendo mi colección de discos sin este disco. me gusta escucharlo de noche, cuando las sombras rondan el corazón, cuando necesito reencontrar el rumbo. cuando necesito detenerme de las múltiples caídas.

(la crítica musical decía que sería imposible superar la perfección “ok computer” y que radiohead se había equivocado de hacer un disco tan propio y tan insuperable y tan perfecto. en el 2000 y en el 2001, lo repetirían: se estaban gestando “kid a” y “amnesiac”)


sábado, 11 de mayo de 2013

de nuevo, patti smith llena el espacio con su voz



 “Jesus died for somebody’s sins… but not mine.
Patti Smith

***


hay algo en la voz de esta mujer que es mágico. de pronto abre su voz y entonces sucede la magia: sucede que es la ciudad de méxico, que es de noche, que su voz es increíble y avanza por el espacio y llena el presente. es la voz de patti smith, la que nació en 1946, la que en 1975 hacía nacer uno de los mejores discos que se llamó “horses” y desde entonces su voz y ella y su presencia y su sonrisa tan cálida hacen esta magia. lanza estos hechizos, desarma las sombras, eriza la piel, hace que los que escuchamos olvidemos el tiempo y estemos ahí. ahí. todo el tiempo, ahí. ahora. tan poderosa es la voz de patti smith, como una curiosa enredadera que avanza e invade la respiración. un temblor furioso que enuncia las palabras importantes, un terremoto hecho sólo con su voz: mis pedazos vuelan por todos lados, me desarmo, me derrito, desaparezco momentáneamente.

canta “beneath the southern cross”, se la dedica a roberto bolaño. le escribo mentalmente una breve carta a bolaño, le digo “en la ciudad de méxico, en mayo del 2013, esta mujer que es la historia y es la música, te está dedicando esto y esto es maravilloso. te quiere roberto, ¿no lo ves?”. ufff. pienso “esta mujer conoció a allen ginsberg y a william s. burroughs y anduvo en esta ciudad buscando el rastro de estos enormes hombres hechos de letras”. ufff. pienso que es increíble esto: aquí & ahora. perfecto.



(con enorme cariño, a mi querida amiga maría, quien también estuvo ahí. al igual que yo, tuvo que recoger los pedazos de sí misma que quedaron tras el mágico acto de la enorme patti smith)



viernes, 3 de mayo de 2013

alicia en las ciudades, ítaca vista por wenders


“Hay sólo un puñado de historias posibles. Todas
las películas no son más que variaciones de un
número limitado de historias.
Sam Fuller

***
(me pregunto, en voz baja: ¿quién soy sin mis obsesiones?)


vuelvo a ver “alicia en las ciudades” de wim wenders (“alice in den städten”, 1974), el cuarto largometraje que filmó. wenders ya era uno de los rostros famosos del nuevo cine alemán junto con werner herzog, reiner werner fassbinder, margarethe von trotta y völker schlöndorf y justamente con esta película logra un lenguaje propio, visual y narrativo, sólido. a través de la cámara, el paisaje, los rostros, las imágenes postulan la visión estética de wenders ante lo que es hacer cine.


es la historia de un escritor de 31 años (¿alter ego de wenders?) llamado philip winter, interpretado por el fantástico rüdiger vogler, quien no puede escribir porque se perdió en sí mismo y no encuentra la salida de ahí, quien viaja por estados unidos con la misión de escribir sobre el paisaje norteamericano pero lo único que puede hacer es tomar fotografías polaroid durante semanas. vuelve sobre sus pasos porque se le acaba el dinero y porque quiere volver a casa, así que llega a nueva york desde donde volverá a alemania. no puede volver directamente a alemania por una huelga de controladores aéreos, así que tiene que volar hacia amsterdam. en el aeropuerto encuentra a una mujer alemana que no habla inglés y a su hija de 9 años, alicia (yella rottländer, ¡increíble!), y les ayuda a comprar sus boletos. la mujer desaparece y le dice que se encontrarán en amsterdam un par de días después. la mujer no llega. pero él necesita moverse, volver a casa, encontrarse. alicia y philip inician un viaje por las ciudades de la república federal alemana y se van conociendo, se acercan, se alejan, se encuentran a sí mismos y se descubren compañeros en sus enormes soledades. avanzan, buscan, se tienen a ellos mismos. son derrotados en su búsqueda una y otra vez, pero avanzan y conforme avanzan se encuentran.

  
es una road movie, lo cual también será un sello característico durante tres décadas en el cine de wenders y su tema es la búsqueda: un viaje que permite a los personajes encontrar lo perdido o lo buscado, donde lo importante no es llegar, sino el viaje en sí. wenders dialoga con kavafis y su maravillosa “ítaca”.



y habla de las obsesiones estéticas: del hecho de tomar fotografías, de registrar ese momento, de mirar a través de la cámara y que las imágenes y los paisajes pueden contar historias sin necesidad de palabras. philip y alicia son los personajes, pero también cada paisaje, cada lugar, cada ciudad.


(nota 1: la fotografía es en blanco y negro, y es un trabajo maravilloso de robby müller, quien filmará con wenders muchas películas más.)

(nota 2: en 1994, wenders filmaría “historia de lisboa”, de nuevo trabajaría con rüdiger vogler (quien será su actor fetiche a lo largo de los años) en el papel de philip winter, el senhor inverno; de nuevo, vogler estaría buscando respuestas, ahora como un coleccionista de sonidos, descubriendo lisboa)